Allí se encontraba la presencia inhumana que le ayudaba a razonar. Un recorrido diario de las ideas bifurcadas en mínimos detalles y de sensaciones que se van plasmando en las paredes. Una conjugación de percepciones que se materializa en un papel y un pequeño retrato de toda esa vida que pasó. Unos restos de manías en alguna vieja colección y toda esa basura redundante.Una simple explosión de tonterías que terminan en vos.
Como me gustan los días como este.Cuando sea grande me voy a ir a vivir a un país donde todos los días sean como este.Donde la gente se vista de celeste y coma chocotortas como snacks.
Una mañana amaneció sintiendose bien, pero no de esos bien que te revuelven el estomago y te hacen cantar, bien, sí, solo bien.No escucho su música favorita ni agarro por Pueyrredón.
[...Hoy se va a tomar la Gral. Paz.
Hoy se va a tomar un mate hasta llegar al cielo...].
No creo que alguien más pueda interponerse en su camino.Incluso en su mochila de reserva tiene escondidos un par de recuerdos que se van colando por los agujeritos de la tela.
[...Hoy tiene el punto fijo de olvidar...]
Agarrar velocidad, sentir el frío, pasar el límite, moverse despacio, llegar al sol, correr el tren, recordarlo [...y olvidarlo a la vez...].